lunes, 26 de marzo de 2012

86 Aniversario Del Real Oviedo

Pacheta: “Es tremendo ver el ambiente de fútbol que se respira en el Carlos Tartiere” 

 El aparcamiento del Carlos Tartiere respiró oviedismo desde las 12 de la mañana con la celebración de la fiesta del 86 aniversario del club, que organizó el grupo Symmachiarii. A medida que se acercaba la hora del encuentro los aficionados fueron acudiendo a la cita que registró muy buen ambiente.
Uno de los momentos más importantes del acto fue el homenaje que se rindió a las categorías inferiores de la entidad, con presencia de los jugadores de la primera plantilla que no estaban convocados, Rubiato, Aitor Sanz, Xavi Moré y Óscar Martínez. Los componentes de los equipos inferiores subieron al escenario, donde el coordinador de las categorías inferiores, Fermín Álvarez, recibió una placa con el lema «ser oviedistas con orgullo, valor y garra». La placa se colocará en los próximos días en las instalaciones de El Requexón. Ese mismo lema es que se podía leer en el tiffo que Symmachiarii desplegó al inicio del encuentro.
Una exhibición de Julio García, campeón del mundo de Press banca y la actuación de la orquesta Versión Original fueron otros de los actos que sirvieron para recaudar fondos para colaborar con el Proyecto Redondela, puesto en marcha para facilitar la participación de los equipos inferiores en competiciones nacionales e internacionales.

 El tiempo acompañó desde las primeras horas del día. Con sol imponente y temperaturas por encima de los 25 grados, la fiesta de cumpleaños del Real Oviedo fue un rotundo éxito. La jornada empezó pronto para los organizadores. Algunos miembros del grupo Symmachiarii, encargado del evento, acudieron al municipal Carlos Tartiere a las 08.30 de la mañana. Tras las primeras operaciones organizativas, a las 12 del mediodía comenzó el reparto del bollo y la botella de vino, dando el banderazo de salida a la fiesta, que se prolongaría durante las horas previas. 

El paso de las categorías inferiores para recoger una placa conmemorativa fue el primer momento clave de la jornada. A las dos de las tarde, los chavales, con la excepción de los jugadores de los dos equipos juveniles que estaban disputando sus partidos de Liga a la misma hora, recibieron un trofeo con un lema grabado: «Ser oviedistas con orgullo valor y garra».

La exhibición de «press banca» de Julio García fue otro de los focos de interés. El asturiano fue capaz de batir su récord personal ante el ánimo de la afición azul. La orquesta «Versión Original» puso la nota musical desde primera hora de la tarde. En su repertorio no podía faltar el himno del Oviedo.

Symmachiarii editó un número especial de su magacín analizando la actualidad del Oviedo. Causó especial sensación una entrevista a Aulestia, ex capitán del club que se fue este verano al Cádiz, en la que el vasco expresa con claridad su opinión sobre diversos temas polémicos como su salida del club, la labor de Alberto González y José Manuel Martínez o su sentimiento hacia el Sporting, rival histórico de los azules.

La celebración no terminó al finalizar el encuentro. Hoy, 26 de marzo, día oficial en el que nació el Real Oviedo, la asociación «Espíritu 2003» llevará a cabo su habitual plantación de un árbol en el Bosque Oviedista, junto al parking del Tartiere a las 19.30 de esta tarde.

 El Museo del Real Oviedo vistió sus mejores galas para el homenaje que el club tributó a sus socios más fieles. Los seguidores que esta temporada cumplieron 50 años como abonados del Oviedo recibieron su insignia de oro en un escenario lleno de recuerdos, en consonancia con la celebración. Si algo evoca el Oviedo, es echar la vista al pasado para saborear sus mejores momentos. 

Ángel Martín Vaca, consejero y responsable de la actualidad azul mientras Alberto González resuelve sus problemas personales, fue el encargado de oficiar el acto. «Es un orgullo tener el privilegio de homenajear a nuestros socios más fieles. Ojalá podamos seguir celebrando este acto durante muchos años, y que la temporada que viene sea en Segunda», manifestó Ángel Martín Vaca como introducción al acto.

El club quiso que estuvieran presente en el acto todos los estamentos. Junto al citado Martín Vaca, representaron al Oviedo José Manuel Martínez, director deportivo de la entidad; Evilasio Sánchez, Vili, gerente, y los futbolistas Borja Rubiato y Aitor Sanz, que no pudieron disputar el partido ante el Albacete por lesión, el primero, y sanción, el segundo.

Los galardonados en esta ocasión fueron: Paulino Valle Fernández, José L. Álvarez Fernández, José A. Martínez Cienfuegos, María Luisa Díaz F. Corugedo, Juan Antonio Alonso Argüelles, Óscar Arias Martínez, José Ramón Alonso González, Rafael Álvarez Bayón, Julio José Calviño Touriño, José Luis Jove González, Nicanor Menéndez Fernández, Fernando Suárez Heres, Enrique Rubio Azcorra, Luis M. Álvarez Botamino, Miguel Barcina Eizaguirre, José M. Quirós Rodríguez, Joaquín Peña Alonso y Clodoaldo González Díaz.

María Luisa Díaz, la única mujer en el reconocimiento, era una de las más emocionadas tras recibir el galardón. «Estoy muy feliz, pero también un poco triste», reconoció al final del acto; «la situación actual del Oviedo me da tanta pena que me produce hasta rabia». María Luisa Díaz, socia del Oviedo desde los 11 años y que mantuvo su abono mientras residía en Málaga y León, no duda a la hora de elegir su jugador favorito en estos cincuenta años: «Me encantaba Iriarte, era muy finín, delicado».

A la abonada le cuesta algo más elegir su mejor momento como aficionada azul. «Me acuerdo sobre todo de los partidos que viví de niña. Me sentaba al lado de Aquilino Iglesias y Vélez -periodistas de LA NUEVA ESPAÑA- y disfrutábamos con el fútbol de entonces. El año que quedamos terceros fue muy emocionante, también algunos partidos sueltos como un 5-4 al Elche...», recuerda. Imágenes grabadas en su mente nada que ver con lo que percibe en el momento actual. «Ya en la etapa de Primera dejé de ir al campo porque me ponía muy nerviosa. Hay muchas cosas que no me gustan del fútbol actual, como que la gente insulte tanto», reflexiona.

Entre los reconocidos también había algún rostro conocido. Miguel Barcina, ex consejero del Oviedo, recibió la insignia de manos del ex presidente Juan Mesa. Además, Joaquín Peña, futbolista del Vetusta, acompañó a su padre, del mismo nombre, a la imposición de la insignia.
 El Real Oviedo celebra hoy, 26 de marzo, su cumpleaños, algo que cada día que pasa se ve con más incredulidad. La situación del club es crítica y el paso del tiempo parece ya una condena. Desde aquel año de 1926 en que se firmó el acta de fundación del club en la sede de LA VOZ DE ASTURIAS, jamás se había llegado tan bajo, aunque lo importante, la afición que tira del carro, volvió a dar muestra de que la condena, si la hay, es muy dulce.
Desde el mediodía, la explanada del aparcamiento exterior del estadio se convirtió en una gran fiesta, en una gran manifestación de oviedismo, a pesar de la que está cayendo. Symmachiarii organizó un festejo en el que no faltó de nada. Comida y bebida en la barra. Música en el escenario. Homenaje a las categorías inferiores, carro que deberá tirar del club si antes no acaban con él. Y Julio García, un fijo en las celebraciones de la afición azul, que ayer batió un nuevo récord mundial de press banca.
La cita fue ampliamente seguida, más numerosa a medida que se acercaba la hora del partido ante un invitado de lujo para la categoría, el Albacete, lejos del queso mecánico de Benito Floro, pero un equipo ilustre en Segunda B.
Mensajes para González “Me gustan los problemas, no encuentro otra solución”, cantaba Andrés Calamaro con Los Rodríguez en su Dulce condena y parece ser el eslogan del presidente del Oviedo. Alberto González, ayer muy lejos del Principado, aunque sin destino conocido, está en el ojo del huracán desde que llegó al club azul. Y no se aparta.
La fiesta no estaría completa sin las habituales pancartas contra él, ayer centradas en la condena que debe cumplir por dos delitos contra el fisco. “Nuestro presidente es un delincuente”, rezaba una. “Alberto González a la cárcel ya”, se leía en otra. La afición quiere que cumpla condena. Los cánticos tras el gol de Pelayo atronaron La Ería.
Más calmado fue el día en el interior del estadio. El Tartiere acogió por primera vez un colegio electoral, el más animado de la cita de ayer. La música de la fiesta amenizó el día a los componentes de las mesas. Al menos tuvieron una jornada divertida, lejos de la habitual seriedad de estos eventos.
También fue serio el que se celebró en el museo del Oviedo, donde los socios que cumplen 50 años seguidos de fidelidad a los colores recibieron el homenaje del club. Ángel Martín Vaca, vicepresidente, llevó la batuta de la ceremonia, con José Manuel Martínez, Evilasio Sánchez, Aitor Sanz y Borja Rubiato acompañándole. También allí, pero en la sombra, Juan Mesa, ex presidente y factotum del museo, poniendo su tiempo, su trabajo y, a veces, su dinero.
Ruge la grada Y tras las celebraciones, tocaba aplicarse en un partido fundamental para aspirar a la disputa de la fase de ascenso. Quizá el ánimo de la fiesta previa, tal vez el conocimiento de lo que estaba en juego, puede ser que las ganas de llegar a lo que realmente importa. Algo despertó ayer a la grada. No sólo al sector joven, habitualmente ruidoso, sino al resto, a todos. Desde el principio, la grada cantó, gritó, animó, hizo que los suyos se metiesen en el juego desde el pitido inicial. Cuando llegó el gol, el bramido fue espectacular. Pero cuando en la recta final se vio peligrar el resultado, en ese momento decisivo, la grada rugió. A pie de campo, se notó que el Albacete estaba condenado. Y esa sí que no era una dulce condena.

FOTOGRAFIAS: Jonás Sánchez
TEXTOS: La Nueva España, El Comercio, La Voz De Asturias

domingo, 25 de marzo de 2012

Real Oviedo-Albacete




Incidencias: Partido correspondiente a la trigésimo primera jornada de liga disputado en el Carlos Tartiere ante 9.613 espectadores, según los datos facilitados por el club. Se guardó un minuto de silencio en memoria del periodista ovetense José Vélez Abascal y de todos los oviedistas fallecidos el pasado año. 






 El Oviedo ganó esta tarde (1-0) ante el Albacete y se metió en la cuarta plaza de la clasificación, gracias a un solitario gol de Pelayo en el partido disputada en el Carlos Tartiere. La alineación del Oviedo no presentó sorpresas con lo previsto y Álvaro, Nano y Jorge Rodríguez fueron titulares, como se preveía.
En la primera mitad, el Albacete no se acercó a la portería de Lledó, al que le bastó con estar atento en alguna salida al borde del área. Juanma volvió a liderar la defensa, mientras que la ausencia de Aitor Sanz se notó a la hora de jugar por el centro, lo que obligaba a Manu Busto y Abásolo a recibir en esa zona del campo.
Una vez más, el problema del Oviedo fue el remate, ya que Martins estuvo desacertado en todos sus intentos y su aportación fue sobre todo en el trabajo sin balón y para recibir los balones de Lledó.
La primera ocasión para los azules llegó a los 5 minutos en un centro de Nano, que Abásolo, en segundo palo dejó de cabeza, pero Martins no llego al remate al borde del área pequeña. Solo tres minutos después un nuevo centro de Abásolo, pero Martins remató muy flojo y desviado.
El acoso del Oviedo no cesaba y el Albacete estaba a merced de los azules que tenían el balón y apenas pasaban por apuros.Una de las ocasiones más claras llegó al borde de la media hora, cuando Martins peinó una falta sacada por Nano y Pelayo remató para que se luciera Miguel. Un disparo lejano de Jorge Rodríguez que detuvo sin problemas Miguel fue el prolegómeno del gol de los ovetenses.
El Oviedo obtuvo el premio a su mejor juego en el tiempo añadido del primer tiempo. Martins recuperó un balón, lo mandó de tacón a Nano que centró al segundo palo, donde llegó Pelayo para cabecear de forma inapelable al fondo de la red y hacer justicia a lo que se había visto en el terreno de juego.
Tras el descanso el entrenador del conjunto manchego dio entrada a Herreros en sustitución de Alba y eso se tradujo en que su equipo ganó algo de terreno y comenzó a llegar a las proximidades de la portería de Lledó. Abásolo dispuso de la primera ocasión tras el descanso, en una acción personal al borde del área, que salió a córner tras pegar en un defensor del conjunto manchego.
No fue la mejor ocasión de los azules, ya que a los 58 minutos una buena internada de Owona finalizó con un pase de Pelayo a Álvaro, que disparó fuerte para que rechazara Miguel, en una muy buena intervención. El balón cayó a los pies de Abásolo que desde el borde del área, con todo a favor, disparó muy alto.
El Oviedo volvía a mandar en un partido que, no obstante, estaba más abierto, ya que el Albacete arriesgaba mucho más de lo que lo había hecho en todo el primer tiempo y ello conllevaba cierto peligro, ya que el balón rondaba ambas áreas.
A medida que iban pasando los minutos, algunas imprecisiones en la salida de balón de los ovetenses se iban traduciendo en robos de balón para los manchegos, que llevaban cierta intranquilidad a la grada.
No obstante, las mejores ocasiones, de un partido roto, seguían siendo para los de Pacheta, como a los 75 minutos, en un remate de cabeza de Pelayo que salió desviado de la portería. La réplica visitante llegó en un centro que no encontró rematador, pese a que llegaban dos jugadores manchegos al área.
En el último cuarto de hora la presión del Albacete se incrementó y el Oviedo estaba encerrado en el área, si apenas fuerzas para tratar de tener el balón y evitar por esa vía el sufrimiento de los minutos finales. Un disparo de Adriá obligó a Lledó a despejar de puños.
Los últimos minutos fueron de emoción y sufrimiento para los azules, que tuvieron como principal aliada a una grada que se volcó con los suyos y les dio el aire necesario para aguantar el resultado que les metía en la fase de ascenso.






FOTOGRAFIAS: Jonás Sánchez

miércoles, 21 de marzo de 2012

Conquense-Real Oviedo



ALINEACIONES: 
U.B. Conquense: Caballero; Samu Piette, Juli Ferrer, Cuesta (Dani Martí, minuto 63), Morillas; Javi Selvas, Cubillo (Mauri, minuto 75); Ruano (Cristian, minuto 75), Dani Rodríguez, Pulga; y Vinuesa
Real Oviedo: Lledó; Owona (Negredo, minuto 79), Juanpa, Juanma, Candela; Teo (Falcón, minuto 63), Aitor Sanz, Pelayo, Abasolo; Manu Busto y Martins (Oscar Martínez, minuto 63)

ÁRBITRO: 
Munuera Montero, perteneciente al Comité Andaluz. Amonestó a los locales Pulga, Cubillo, Javi Selvas y Morillas, y a los visitantes Candela, Owona, Pelayo, Falcón y Oscar Martínez. Expulsó, por doble amonestación, a Aitor Sanz en el minuto 57

EL GOL: 
1-0, minuto 85. Mauri, con la derecha, desde dentro del área

INCIDENCIAS: 
Encuentro correspondiente a la trigésima jornada del campeonato de Segunda B, disputado en el estadio municipal de La Fuensanta, ante cerca de medio millar. Presencia de seguidores oviedistas en las gradas. Césped en buenas condiciones. Tarde fría.





A tan sólo 8 jornadas para que termine el campeonato, la mala dinámica a domicilio sigue perjudicando al Real Oviedo. A estas alturas de la competición, cada tropiezo supone un lastre demasiado pesado para lograr el objetivo final de terminar en los puestos de promoción. Esta derrota, de nuevo contra un equipo de la zona baja de la tabla, supone otro duro golpe para los azules, que no terminan de mostrar la regularidad que exige ser uno de los candidatos al ascenso.

Entre los once jugadores que saltaron a La Fuensanta había una ausencia notable. Nano, que cumplía sanción tras su expulsión en el partido que enfrentó a los azules contra el Sporting B, no viajaba a Cuenca. El interior azul estaba siendo uno de los fijos en el equipo titular de Pacheta, que decidía devolver la titularidad a Teo para sustituirle. El resto del equipo, sin cambios respecto al que lograra la victoria contra el filial rojiblanco.
El partido pronto se mostró tan frío como la tarde conquense que había recibido a la expedición oviedista. Ninguno de los equipos tomaba la iniciativa, y las interrupciones se fueron convirtiendo poco a poco en la tónica habitual. El colegiado andaluz, Munuera Montero, protagonizó un arbitraje muy polémico, constantemente criticado por la grada, y que se saldó con diez cartulinas amarillas –siete para los azules- y una expulsión, la de Aitor Sanz al comienzo de la segunda mitad.
Manu Busto tuvo la ocasión más clara en sus botas, a los 20 minutos de juego, pero su vaselina no sorprendió a Caballero, que atajaba sin problemas el primer acercamiento con peligro del partido. Antes, Aitor Sanz con un disparo desde la frontal del área, y Teo, en una acción en el área que pudo acabar en penalti, ya habían intentado adelantarse en el marcador. Pero el balón salió alto, en la primera ocasión, y Montero no señaló la pena máxima, en la otra.
La expulsión de Aitor Sanz tras ver la segunda cartulina amarilla, tan rigurosa como la primera, en los primeros minutos del segundo tiempo, terminó por apagar del todo las luces en el bando oviedista. Sin embargo, los locales no supieron aprovecharse de esta nueva situación, y en superioridad numérica se hicieron con la pelota, pero seguían sin acercarse con peligro a la portería de Lledó.
El gol de la victoria llegó a falta de 5 minutos para el final, en una acción desafortunada para el Oviedo. Mauri fue el encargado de recoger un balón que había quedado muerto en el área tras un rechace y, en posible fuera de juego, anotaba el único tanto del partido. A pesar de la polémica, el 1-0 subía al marcador. Suficiente para anular la capacidad de reacción del Oviedo, que ya no pudo hacer nada por puntuar en Cuenca, y que ve peligrar sus objetivos con una nueva derrota injustificable.






-El equipo muestra una cara en el estadio Carlos Tartiere y otra distinta lejos de él 
-No somos fiables fuera de casa, ¿verdad? Creo que veníamos con buenas sensaciones y hemos querido competir, pero no se puede competir si no damos una patada y en los primeros minutos ya tenemos a los dos centrocampistas y a los dos laterales con tarjetas. Esto nos condiciona y es muy complicado competir así. Estoy asustado con lo que está pasando, tremendamente asustado. Admito cualquier crítica al juego, pero no es normal lo que oyes y lo que los jugadores dicen que está pasando. Hay algo que no me cuadra y no puede ser que todos los días no nos dejen competir. Hoy, cuando estamos metidos en el partido, nos vemos condicionado en veinte minutos. Con ello no quiero achacar a que no estuvimos brillantes. Su gol llegó tras un rechace y hay poco que objetar. No estamos siendo excesivamente fiables fuera de casa, mientras que en nuestra casa somos muy buenos. Estamos pagando no tener lejos del estadio Carlos Tartiere las buenas sensaciones que tenemos en él, pero hoy creo que hemos jugado condicionados y es muy complicado competir así.

-Cuando comenta que lo que dicen los futbolistas, ¿a qué se refiere? 
-Las sensaciones que ellos cuentan, están condicionados. Estoy asustado y admito toda crítica al juego; el único responsable soy yo, pero vuelvo a repetir que es muy complicado, aunque vamos a seguir peleando. Felicito al Conquense, pero no me queda otra que pensar en el Albacete. Les pido a la afición que crean en el equipo y desde aquí les vuelvo a pedir que den ese último empujón, como el del pasado sábado, y que sólo crea en un equipo que va a romperse la cara por ganar al Albacete.

-Es un discurso complicado con los últimos encuentros a domicilio 
-Hoy he visto unas cosas distintas a las de Vecindario. Hemos estado metidos en el partido hasta el minuto 85, defendiendo, sí, claro, pero vuelvo a repetir que el partido estaba condicionado. Luego, el tercer cambio viene para evitar una lesión mas grave. Todo estuvo condicionado por una circunstancia u otra. Si eres contundente y no tienes posibilidades de serlo, nuestra manera de competir se va al suelo. Ahora parece que no podemos competir...

-No se recuerda un partido con tan pocas llegadas al área rival 
-Hemos tenido situaciones en las que hemos elegido mal, aunque hemos tenido opciones en tres cuartos de campo, pero la gente que tiene talento no ha estado brillante y eso lo acabamos pagando. Es cierto que no hemos hecho todas las situaciones de peligro que solemos hacer, aunque creo que seguimos pagando caro las ocasiones del rival. Es el primer día que me escucháis decir que no pude competir...

-Los locales reclamaron un posible penalti a Vinuesa, ¿lo ha visto? 
-No lo sé, también he visto alguna situación peligrosa a Juanma en el otro área. No voy a entrar a valorar una cuestión puntual, sino que entro en la globalidad del partido. Estoy preocupado porque fuera de casa no estamos a buen nivel y es lo que tenemos que corregir en estas últimas cuatro salidas que nos quedan. 




-¿Está insinuando que hoy no han sacado un resultado positivo debido al arbitraje?
-Esa es una conclusión que hace usted (por el periodista), yo sí que he dicho que a los veinte minutos no podíamos competir como en el primer minuto. Eso condiciona, y mucho, al equipo, pero no quiero desviar la atención del juego ni del resultado.

-El bagaje ofensivo de los suyos ha sido muy escaso y así puede resultar complicado ganar un partido... 
-Esa es su opinión... 
Para acabar, la afición del Real Oviedo ha vuelto a dar muestras de su grandeza y esta tarde ha acudido a La Fuensanta a pesar del frío y de la hora a la que se ha disputado el partido
La afición nos apoya en todos los sitios a los que vamos y no somos capaces de darles una alegría para que se marchen contentos a casa. Eso es algo que me martillea y a los jugadores también. Agradezco a la afición su apoyo, lo hago siempre e incluso alguno pueda pensar que lo que tenemos que hacer es ganar, tiene razón, pero trabajamos y entrenamos para ello. Hay días que las cosas salen y otros no, aunque es cierto que fuera de casa no estamos dando ese nivel que sí damos en nuestra casa.




FOTOGRAFIAS:IGNACIO FELGUEROSO
TEXTO: DAVID ALONSO Y VAVEL.ES

martes, 20 de marzo de 2012

Punto Pelota En El Real Oviedo-Sporting B

Punto Pelota estuvo en Oviedo haciendo un reportaje sobre el REAL OVIEDO en su partido contra el filial del Sporting y como no,este fotógrafo colaborador habitual del programa les hecho una mano y de paso realizo unas fotos. Esperando que os guste aquí os dejamos el video y algunas fotos sobre ello.








FOTOGRAFIAS: JONÁS SÁNCHEZ

domingo, 18 de marzo de 2012

Real Oviedo-Sporting De Gijón B


  
ALINEACIONES: 
Real Oviedo: Lledó; Owona, Juanpa, Juanma (Jorge Rodríguez, minuto 77), Candela; Abasolo (Teo, minuto 90), Pelayo, Aitor Sanz, Nano; Manu Busto y Martins (Oscar Martínez, minuto 58)
Real Sporting B: Dennis; Luis Hernández, Cruz, Moisés, Alex Menéndez; Jara (Guille Pérez, minuto 89), Landeira (Adama, minuto 89) Alex Barrera, Juan Muñiz; Carlinos (Diego, minuto 75) y Guerrero

ÁRBITRO: 
Vicente Moral, perteneciente al Comité Castellanoleonés. Amonestó a los locales Aitor Sanz, Manu Busto, Abasolo, Martins y Jorge Rodríguez, y a los visitantes Luis Hernández, Carlinos, Guerrero, Alex Barrera y Juan Muñiz. Expulso al visitante Cruz con roja directa en el minuto 5 y al local Nano por doble amonestación en el minuto 67.

GOLES: 
1-0, minuto 9. Manu Busto, de penalti
1-1, minuto 80. Guerrero, tras una acción a balón parado
2-1, minuto 85. Juanpa, de cabeza, en el segundo palo

INCIDENCIAS: 
Encuentro correspondiente a la vigésimo novena jornada de Liga de Segunda B, disputado en el estadio Carlos Tartiere ante 10.121 espectadores. Tarde-noche agradable. Césped en buen estado. Se jugó con luz artificial. Se guardó un minuto de silencio en memoria de José María Felgueroso, periodista deportivo fallecido el pasado domingo en Oviedo y que durante muchos años cubrió la actualidad diaria del club azul. 

 El Oviedo se impuso al Sporting B por 2-1 en el Tartiere en un partido que se le puso de cara ya a los 8 minutos cuando se adelantó en el marcador y su rival se quedó en inferioridad numérica. Sin embargo, el duelo, muy tosco y falto de ritmo, permitió a los hombres de Manolo Sánchez Murias empatar tras la expulsión de Nano. Pero un gol de Juanpa, ya en el minuto 86, le dio los tres puntos que le permiten seguir aspirando a entrar en la fase de ascenso.
El equipo de Pacheta saltó con los previstos, salvo por la presencia de Abásolo en la banda derecha del centro del campo en detrimento de Teo. Volvieron a la alineación Juanma, Candela, Pelayo y Manu Busto. Mientras, en el Sporting B, las novedades fueron el regreso de Juan Muñiz, Moisés y Carlinos.
Los locales empezaron el partido tocando mucho más que en encuentros precedentes, favorecidos por la presencia sobre el césped de jugadores como Manu Busto y Abásolo, a los que les gusta más tener el balón. Por su parte, el filial rojiblanco esperaba su oportunidad para la contra. Sin embargo, a los cinco minutos, el escenario del partido cambió. Una recuperación de balón de Juanma en el centro del campo permitió al canario avanzar y, tras una pared con Pelayo, que le devolvió el balón en vaselina al área, fue derribado por Cruz cuando encaraba a Dennis. El colegiado decretó penalti y la expulsión del defensa.
La pena máxima la transformó Manu Busto, que tuvo que lanzar en dos ocasiones. En la primera, ajustó el balón al palo derecho del portero. Y, en la repetición, el cántabro lo mandó a la escuadra izquierda.
Con ventaja en el marcador y un jugador más, los azules se hicieron con el control del encuentro. El Oviedo era otro y ni siquiera Lledó sacaba siempre en largo. El equipo intentaba salir jugando desde atrás. El juego sufrió numerosas interrupciones por faltas y la atención a jugadores, lo que impidió que la continuidad.
El Sporting B se estiró un poco mediado el primer tiempo, pero tímidamente, ya que la inferioridad numérica le impedía presionar arriba. En una de esas llegadas, Jara, desde la derecha, centró bien, pero el remate de cabeza de Guerrero salió desviado.
Los azules, con Abásolo y Nano cambiando de banda, dispusieron de varias oportunidades para aumentar su ventaja en el marcador. La primera, en un remate de Manu Busto desde el borde del área, tras un centro de Nano. Pero Dennis, bien colocado, envió el baló a córner. El centrocampista Nano dispuso de dos ocasiones. La primera, en un lanzamiento lejano que pasó cerca de la escuadra. Más clara aún fue la otra que tuvo el malagueño, en un balón que le cayó en el área, pero su fuerte disparo salió alto.
Guerrero volvió a intentar poner a prueba a Lledó, pero chutó muy cruzado desde el borde del área. La réplica azul la dio Pelayo desde el borde del área, pero mandó a las nubes.
En la reanudación, cuando no se había cumplido un minuto, el Oviedo disfrutó de una buena oportunidad en un remate de Manu Busto en el área pequeña, pero el balo salió fuera. El partido seguía por los mismos derroteros que en la primera mitad, con el Oviedo controlando el partido y con poco juego debido a las numerosas faltas que se producían, por lo que las únicas ocasiones, que tampoco eran claras, llegaban en acciones a balón parado.
El Oviedo tocaba cómodo en el centro del campo, pero sin profundidad, y el Sporting B no era capaz de robar para tratar de salir, lo que convirtió el partido en muy plano y en un pasar de minutos sin que ocurriera nada en el campo.
Un disparo lejano de Manu Busto a los 66 minutos rompió la atonía del encuentro, pero más aún lo hizo la segunda tarjeta amarilla a Nano, por una mano en el centro del campo, que dejó a los dos equipos con diez jugadores sobre el campo.
El filial rojiblanco estiró entonces líneas y comenzó a llegar. Como hizo Juan Muñiz a los 78 minutos. Fue un aviso de lo que sucedería poco después en un disparo de Guerrero desde el vértice del área que acabó sorprendiendo a Lledó y significando el empate para los rojiblancos.
El equipo azul protesto un gol anulado por fuera de juego de Manu Busto, que había recibido de Abásolo. Un minuto después, Manu Busto botó una falta lateral y Juanpa cabeceó al fondo de la red en el segundo palo, volviendo a poner por delante en el marcador a los azules. Y, en el 90, Pelayo envió al palo un remate que pudo significar la sentencia. Pero el Oviedo tuvo que seguir sufriendo, pese a que el filial no disfrutó de más oportunidades.


FOTOGRAFIAS: JONÁS SÁNCHEZ